ANÁLISIS DE UNA IMAGEN FOTOGRÁFICA

 

 La fotografía elegida para su análisis es una fotografía vista en una de las clases teóricas, Blind Woman, de Paul Strand, tomada en Nueva York en 1916. Forma parte de una variedad de fotografías directas tomadas en la calle sobre distintas personas marginales, en las que el fotógrafo, mediante un trucaje, utilizó un espejo de ángulo recto y un lente falso para simular que apuntaba la cámara en una dirección, mientras realmente apuntaba hacia quien quería retratar, permitiéndole tomar fotografías de incógnito sobre la gente y sus reacciones naturales en sus días habituales en la calle. No pude encontrar información concreta sobre la cámara utilizada, pero es posible que fuera una cámara de placas de su época.

 En este retrato particular se aprecia a una mujer ciega que, por el contexto de la pared fondo, el ropaje y los elementos como el cartel en su cuello o la chapa que lleva puesta, se encuentra en la calles de la ciudad, presumiblemente pidiendo limosna. Considero que la principal prioridad de Paul Strand en esta fotografía era dejar retratados con total claridad y de manera concisa los elementos que no dejan a duda la situación de la mujer y generan una incomodidad que interpela al espectador, surgida de la realidad que transmiten: la mirada desviada y nublada, el cartel nítido que indica BLIND (ciega) en letras mayúsculas y gruesas, la chapa que lleva junto al cuello. Son elementos simples a la vista que rápidamente permiten identificar a la retratada y comprender su día a día. La posición frontal también es clave para dejar retratados todos estos elementos objetivamente.

 A pesar de ser una fotografía más espontánea, iluminada por el entorno -posiblemente, luz natural-, la claridad u oscuridad de ciertos elementos nos llevan la mirada a distinguir bien claro y definido el cartel escrito, que a su vez nos remite a la cara de la retratada y su mirada. Si se observa más detenidamente, la plaquita que se posiciona por encima del cartel se trata en realidad de una licencia para limosnar en la calle otorgada por el gobierno. Como fue conversado en clase, la inclusión de este detalle otorga una nueva capa de ironía al retrato, relacionada con el mensaje social que transmite: una mujer ciega en situación de calle, en lugar de ser ayudada por el Estado, recibe de parte de las autoridades una placa con un número que se roba su identidad; un permiso para pedir limosna en la calle, que de otra manera, tendría prohibido. Obtiene la libertad para seguir en situación de calle "legalmente", en lugar de una verdadera contención social y ayuda económica. Incluso a nivel de composición, el hecho de que la chapa de permiso se sitúe por encima del cartel que indica CIEGA, nos hace replantearnos quién realmente está ciego, quién desvía la vista: si será la señora, o más bien, el gobierno que debería ampararla.

 Considero que este retrato puede llegar a interpelar a mucha gente porque es fácil identificar la situación social de la retratada en los entornos urbanos; de hecho, sigue siendo algo recurrente hoy día, incluso a más de cien años de tomada la foto. El elemento de la ceguera, ya sea temático o compositivo, nos puede hacer cuestionarnos a nosotros nuestra propia ceguera ante la situación, y la capacidad que tenemos o no de, literalmente, desviar la mirada ante las personas marginales y en situación de calle. La composición directa, concisa, con elementos nítidos que resaltan, identificables por la luminosidad, la forma, el recorte contra el fondo, la vista frontal y el plano cercano de retrato aportan a la crudeza de la realidad cotidiana de la retratada, la presentan tal como es, como visible, como real. Esta fotografía se aleja de la estética de la fotografía pictorialista de la época en que fue tomada, y remite más a lo que posteriormente se conoció como fotografía directa. Debido a las connotaciones sociales y políticas en ella (sean intencionales del autor en mayor o menor medida), le daría la apreciación de "importante", en función de que, a modo de recordatorio, necesitamos mirar, dirigir la mirada a más retratos como éste, que nos den una dosis de lo que para muchos es una realidad cotidiana, y nos dejen una impresión real que nos lleve a actuar.